Los azulejos son una parte importante de la cultura portuguesa. Si visita Lisboa, verá estas piezas decorando palacios, fachadas e incluso estaciones de tren. Muchos de ellos son parte de mosaicos que narran una historia y crean maravillosas obras de arte.
Tal es la importancia de los azulejos en esta ciudad que hay un museo dedicado a ellos: el Museo Nacional do Azulejo do Lisboa, donde se exhiben tanto modelos antiguos, del siglo XVI, como contemporáneos. Hay piezas de diferentes estilos y colores. Si quieres ir más allá, en este museo puedes ver el proceso de preparación y restauración de estas piezas.
Pero no es necesario ir a un museo para ver azulejos en Lisboa. Las calles del barrio de Alfama son populares por la decoración de las fachadas de las casas. Si subes al miradouro de Santa Luzia, que se encuentra en este mismo vecindario, además de impresionantes vistas de la ciudad, puedes ver los azulejos blancos y azules que forman parte de su decoración.
Incluso las estaciones de tren como la de Oriente tienen obras de arte hechas de azulejos.
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